Diógenes Escalante (1877-1964): La participación venezolana en la explotación petrolera (1926)
Ramón Rivas Aguilar
Fue una figura política estelar del gobierno Gomecista. Tuvo un papel relevante en la diplomacia venezolana. Un hombre atento a todo lo relacionado con la industria petrolera en Venezuela y el mundo. En efecto. Su labor diplomática que cumplió en algunas naciones, le fue de gran utilidad para conocer de cerca el comportamiento de la industria petrolera americana e inglesa, en el Hemisferio Occidental, que solo estaban beneficiando a las operadoras extranjeras. Según él, Se le estaba regalando el petróleo a las compañías petroleras extranjeras y esto constituía la misma conducta que hicieron los conquistadores con nuestros indígenas: cambio de oro por baratijas. Asimismo, señalaba que el país no tenía control sobre recurso en manos del capital internacional. Una especie de enclave sin dominio económico y jurídico. Por lo que la conformación del modelo de asociación superaría ese tipo de barrera y la nación saldría favorecida. Esto, era viable por cuanto en el mundo internacional existían algunas experiencias de modelos de asociación (Rumanía, Rusia). Para él, un mal negocio en la que Estado venezolano no tenía ningún resultado económico con el viejo esquema de las concesiones.Así, lo expresó: “La experiencia del desarrollo de las compañías inglesas de petróleo que trabajan en Venezuela, ha demostrado el error económico que se cometió entre nosotros al vender a los extranjeros las concesiones a precios irrisorios de contado, en lugar de haber buscado la asociación con ellos bajo la forma de participación en el capital: acciones de sus empresas o de participación en las utilidades de éstas”( Boletín del Archivo Histórico de Miraflores. Número 70, CARACAS, Enero- Febrero de 1972, Año XIII, PÁG. 348). Pone como ejemplo cómo unas cuántas compañías extranjeras obtenían beneficios fabulosos, perjudicando a la nación. Por lo que la asociación era el camino a seguir para obtener los mejores resultados económicos, fiscales y jurídicos. Más control y mayor soberanía.En efecto: “La riqueza petrolera de Venezuela es hasta cierto punto una riqueza internacional que nos escapa jurídica y económicamente. No ejercemos control alguno sobre las acciones de compañías anónimas con asiento principal en el extranjero, en donde únicamente circulan estos valores, no participamos materialmente en ellos. Podría decirse que nuestras minas están más en el exterior que en el propio país” (1972, p. 350). Es decir, lo que llamarían los teóricos dependentista un enclave económico. Por lo que la fórmula de Asociación sería lo ideal para recuperar el control y la soberanía sobre el petróleo, en la mirada de Diógenes Escalante.
Un tipo Empresas Mixtas con la modalidad 50-50. Una modalidad de tal naturaleza, era viable según la perspectiva de Escalante, un conocedor de la complejidad del mundo petrolero para aquel entonces, por cuanto ya existían algunas de esas experiencias en algunas partes del mundo “El sistema de la asociación fue el que adoptaron hace algún tiempo Rusia y Rumanía, países que hicieron en el particular la misma dura experiencia de Venezuela. La adopción del sistema de asociación, evitaría, en definitiva, un proceso de concentración y monopolización que solo favorecían los intereses de algunas compañías extranjeras” (1972, pp. 349-350).
Por tanto, “Con el fin de mantener la política de puerta abierta y de equilibrio de intereses extranjeros, que hasta el presente ha practicado sabiamente el Gobierno de Venezuela, convendría que los capitales que en el futuro se asocien para la explotación de las Reservas Nacionales, fuesen mitad norteamericano y mitad ingleses, por cuanto Inglaterra y los Estados Unidos son los dos países que hoy dominan el mercado de petróleo”(1972, p. 350).
La pregunta de cierre: porqué no fue posible un proyecto de tal naturaleza, que hubiese cambiado de manera radical la relación entre el Estado y las compañías petroleras internacionales, las más importantes como lo fueron las inglesas y las americanas. La razón fundamental fue que las compañías petroleras no iban a permitir que el Estado venezolano se involucrara en el negocio del petróleo, por cuanto podría tener injerencia en materia de precios y volúmenes de producción. Además, dos años después se conformó el cartel de las siete hermanas que dominó el mercado petrolero mundial hasta la fundación de la OPEP, el 14 de septiembre de 1960. Este negocio nada que ver con los países dueños de su petróleo. No obstante, décadas después la nacionalización de la industria petrolera nacional con el artículo 5° abrió la posibilidad en un futro no muy lejano la conformación de las Empresas Mixtas. Hoy, una realidad planetaria.
Por tanto, en el espíritu de Diógenes Escalante una postura patriótica, nacionalista y venezolanita. Nada que envidiar a toda esa izquierda marxista y revolucionaria, vanidosa, engreída, arrogante y soberbia que se creen los únicos en tener el monopolio de la verdad. Nada de eso. El nacionalismo petrolero fue el fruto de la conciencia nacional contra el capital petrolero internacional que comenzó con el gobierno de Cipriano Castro. La conciencia nacional versus capital internacional. Resultado: nacionalismo petrolero, independientemente de todo tipo de Estado y gobierno.En fin, el gomecismo no escapó al desarrollo de una conciencia crítica contra el capitalismo mundial. Con la diferencia que estaba convencido de que el capitalismo era una fuerza histórica poderosa importante para acelerar la modernización de la nación. No tuvo el gomecismo prejuicio histórico contra el capitalismo, sin dejar de cuestionar su conducta en algunas acciones que perjudicaban al país.
En consecuencia, Diógenes Escalante un visionario que vio en perspectiva histórica el futuro del petróleo venezolanomás allá del espíritu y la praxis rentista que se había conformado en Venezuela desde 1920.La fórmula de Asociación (50-50) significaría que el Estado venezolano entraría directamente con las operadoras extranjeras, en un proceso de exploración, explotación, refinación y comercialización de petróleo y así participar en el mercado petrolero mundial. Fue la visión de Diógenes Escalante (1920-1945) un insigne diplomático del gomecismo y el postgomecismo.