Las primeras huellas humanas en el planeta de los poetas La luna plateada en el ánima de Tagore Hace 56 años (1969)

0

 


 

 

 

Las  primeras huellas humanas  en  el planeta de los poetas

La luna plateada  en el ánima   de  Tagore

Hace 56 años (1969)

 

Ramón Rivas Aguilar  

 

 

A

Luis Herrera  Campins

En aquellos días  vio en el horizonte el fin  de la Historia  Contemporánea

Y la génesis  de la Historia  Mundial

Una intuición intelectual para comprender  el nacimiento  de una nueva forma 

de concebir  los eventos históricos.

 

Laica  que junto a otros del mundo de la zoología  otearon el camino al fugaz mortal   

Para recorrer  los mágicos senderos  del universo

 

Tuve el privilegio  que a los veinte años en aquella  geografía entre montañas y cordilleras, ríos en el instituto privado Cecilio Acosta, fundado por dos insignes maestros Don juan Canelón Cestari y su esposa Doña Rosa,  desde  un árbol de aguacate pude mirar con sorpresa y  deleite como se estampaban las primeras huellas   en  la luna. Una luna plateada,  poetizada por los liricos, girando alrededor del universo.  Una sorpresa para hombres y mujeres,   en aquella sabana,   la sabana de los dioses,  Santa rosa de Carvajal,  la tierra del  encanto,   con sus nubes iluminadas  con el cruce fugaz  de los colores mestizos del arco iris y acompañada con el relámpago del Catatumbo. El año de 1969  una fecha histórica  que abrió   el camino de la fe  del hombre en la ciencia hacia la conquista del universo. Una  aventura con   implicaciones en el futuro de la humanidad. En aquel momento no avizorábamos las consecuencias históricas de esas huellas para el destino de la historia universal.  Aún,  en estos tiempos    de  profundas revoluciones en el campo   de  la ciencia y la tecnología,    se plantean interrogantes  sobre  el impacto  de la conquista del espacio sideral en la vida material y cultural de nuestra tierra. El viaje de apolo hacia a la luna, estuvo en manos    de un genio V. Braun, una  aspiración  del hombre  en la tierra   que le  permitiría  soñar  con la   prolongación de  la especie humana  en  las inmensidades del  cosmo. El hombre, el  mortal entre los cielos y la tierra trazó el camino  hacia  la inmortalidad  a través de la reproducción de la especie  humana en otros planetas.

En esa tarea  de   examinar   los efectos de ese célebre viaje, el genio de la ficción, Julio Verde,  cambió de manera radical la  forma de cómo y de qué manera se interpretaban los hechos históricos antes de la llegada del hombre a la luna.  

En nuestra geografía, la figura política de Luís Herrera C.,  expresidente de la República  de Venezuela, asomó  la exquisita reflexión sobre la naturaleza de este gran  acontecimiento  científico y su  impacto en la forma  de concebir los fenómenos históricos en los próximos siglos. En efecto.  En un artículo en el Nacional, en esos días del año de 1969, estampó  un párrafo que perdurará en los tiempos: adiós a la Historia Contemporánea.  Se inicia  una nueva  etapa en la historia de la humanidad. La era cósmica;   la era intergaláctica, la era de la historia mundial, de la historia global.  Así, se trata ahora de la historia mundial o global, con las más diversas corrientes historiográficas con la presencia del hombre de carne y hueso, el hombre del día y la noche que labra su destino vital en el mundo que haría de la interconectividad  el tejido de lo uno, de lo otro y lo diverso. La historia mundial con lo pequeño y lo gigante  del cosmo. La tierra desde  el espacio, desde  un planeta,   desde el universo en una   imagen  global.   Así,  comenzaba a morir   las viejas nociones del espacio y el tiempo histórico. La historia  mundial, el  eje axial   de todas las posibilidades del hombre    en libertad. Del mismo modo, la muerte de las ideologías,  de las utopías, del socialismo, del comunismo,  del estatismo en un mundo de la incertidumbre y complejidad  en la que la vida estaría   en un  nuevo ritmo de la historia universal. Asimismo,  se iniciaba la era de la conciencia ecológica con unos impactos  políticos en millones de mortales, en esta  pequeña  esfera, rodando   por los misteriosos senderos cósmicos del universo. Hoy, la ciencia y la tecnología con todos los cambios en lo físico  y espiritual del hombre. La era cuántica. La era de una nueva civilización cuántica,  con la Inteligencia artificial,  con el mundo virtual, digital que tiene sus primeros latidos históricos   en  aquel viaje a la luna.  Como diría  Carl Sagan: “somos hijos de las estrellas. Somos  hijos  del universo  con lo más sagrado de la divinidad”.

Es importante recordar algunos de   los titulares que aparecieron  en la prensa venezolana con frases célebres que reseñan aquel extraordinario evento histórico con unos impactos gigantescos en el destino de la historia universal:

“El hombre  de ahora  puede compararse  con la primera criatura  que surgió del mar para poblar la tierra” (Von Braun, 1969);

“La edad  cósmica. Von Braun reconfortado  con el funcionamiento de su obra maestra”. (Von Braun, 1969);

“Conquistada la pálida luz de nuestras  noches  y  nuestro sueños. Aquel  agosto de 1492  y este 16 de julio de 1969”. (Pablo VI).

 

 

“Hoy en la luna.  La gran hazaña del siglo xx en una moneda. La selenegrafía, nueva ciencia”.  

“Coctel lunar. Un barman londinense  ha inventado  el Coctel Lunar, a base de Volka soviética,  coca cola norteamericana  y sidra británica”.

“En su conquista  del cosmos  pone pie  en  el primer astro  e inicia  una nueva edad  en la  historia (Tvn 5)”.

“Douglas Bravo salió de las montañas de Falcón”.

“De ese salirnos de la tierra  vendrá un mayor apego  a la  tierra y de los de la  tierra (Carlos Canache Mata)”.

“Antes de que el hombre  a arriesgará  explorar el espacio  cósmico,  fueron enviados ratones, conejos, monos,  y una perrita…” (Camila de Pérez de Carreño).

“En 25 años  la humanidad ha producido  más conocimientos  que en los cincos mil anteriores. (Profesor López Orihuela).

“Apolo  II  ha asegurado la inmortalidad  de la humanidad (Von Braun)”.

Una nueva  sociedad. Un nuevo mundo. El  águila  ha aterrizado. Nombres para  la nueva edad (José Rodolfo  Cárdenas)

“El paso  más trascendental  de la humanidad  es la conquista  de la luna por el hombre.  La conquista del cosmo. 

“Una nueva frontera .Armstrong  y Aldrin Ambos  Entraron a la historia.  Ambos astronautas  realizaron el espectáculo  más ´prodigioso   de todos los tiempos. Cuarta parte  de la humanidad  ignora  aún  la hazaña  espacial  que conmovió el mundo”

“Los gobernantes de china roja, corea del  norte,  Vietnam del norte  y Albania privaron a más  de 800 millones  de personas  de la noticia  de la llegada del hombre a la luna”.

 “Von Braun, el padre  del Apolo II: El hombre podrá radicarse en la luna. Preparación para  los nuevos tiempos (Luis herrera Campins)

“..Está comenzando  en estos mismos días  una nueva  era histórica. … Este hecho  va a determinar  nuevas formas de pensamiento, de acción y organización humana, pues parece lógico  que nuevas  modernas estructuras advengas    para suplantar   las que son incapaces  de resistir  y adaptarse  a los requerimientos   renovadores de los tiempos revolucionarios  que vivimos” (Luis Herrera  Campins).  

En fin,  Ese acontecimiento histórico-científico,  la hazaña  más prodigiosa de todos los tiempos,  con gigantescas  repercusiones en el ánima  de la historia de la humanidad,  deja un legado universal  que  perdurará más allá  del fin del universo. Por un lado,   la posibilidad   que el hombre   pueda alcanzar su inmortalidad  con su presencia   en lo más profundo del cosmo.  Reinará la especie humana  por los tiempos eternos.

Por otro lado, la posibilidad    de que  nosotros los humanos, míseros mortales, preservemos   con   sabiduría  la   vida  en esta morada sagrada y divina, que  por la insensatez de sus gobernantes pueda estallar  en mil  pedazos en un segundo, manipulando  con sus   temblorosas manos el botón  de los más diversos colores. 

Asimismo, aprovechar  el máximo del conocimiento científico y tecnológico  que se ha desarrollado  a partir  de esa proeza histórica,   para el bienestar  material y espiritual   del planeta. En ese orden de importancia, dejar atrás las ideologías  y la vieja historia  nacional,  parroquiana, localista con la quejumbre y la melancólica manía de la búsqueda  de las identidades que en nada tiene que  ver con el mundo de hoy que se mueve hacia el porvenir. El afán por la cronología, los aforismos  y una cantidad de citas sin conexión y perspectiva.   Hoy,  la historia  es  global, mundial,  cósmica,  con la  fuerza poderosa del hombre   concreto,  el hombre construye su destino vital con espíritu empresarial, enriquecedor, creativo, con la mayor libertad posible para una mayor apertura hacia lo profundo del universo, devela su magia, su misterio,  su belleza y su manto  sagrado y divino. El hombre y el universo  en su perspectiva infinita y  sagrada.    

 

 


Tal vez te interesen estas entradas

Uso cookies para darte un mejor servicio.
Mi sitio web utiliza cookies para mejorar tu experiencia. Acepto Leer más